La red compartida mayorista mexicana está cerca de cubrir el 50 por ciento de la población.
El plan de telecomunicaciones tiene como objetivo aumentar la cobertura de estos servicios en todo el territorio. El proyecto de la red compartida se propone garantizar su instalación para promover precios competitivos, entre otras metas.
Altán redes, la empresa que está desplegando esta infraestructura, anunció la puesta en operación comercial de nuevos mercados con cobertura 4.5G.
El pasado 1 de julio se lanzó comercialmente los mercados de Villahermosa, Tabasco, y Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, los primeros del sureste. Juntos suman 1 millón 260 mil habitantes, incluidas 350 mil personas en poblaciones de menos de 10 mil habitantes en ambos estados. Un 28.2% de la cobertura puesta en operación, «casi el doble del compromiso requerido a ALTÁN para el despliegue de la red en zonas rurales», mencionó en un comunicado.
Red compartida para la mitad de la población
A estos mercados del sureste se suman los de Cuernavaca, Morelos, y Veracruz, operativos desde finales de mayo pasado. Ambos cubren más de 1 millón y medio de habitantes.
Las cuatro áreas comerciales de forma conjunta brindan cobertura 4.5G a más de 2 millones 800 mil habitantes. Estos incluyen 645 mil pobladores en localidades semiurbanas y rurales de menos de 10 mil habitantes. Un 22%, esto es 7 puntos más que el mínimo establecido para la red relativo a cobertura social.
Estos lanzamientos llevan a la red compartida a dar servicio comercial a más del 40% de la población del país. Representa a 45 millones de personas, casi 9 millones de ellas en poblaciones de menos de 10 mil habitantes.
«Para octubre 2019 se alcanzará la cobertura del 50% de la población del país», mencionó la compañía. Con este despliegue de red móvil LTE Advanced se alcanzarán también casi 19 mil poblaciones de menos de 10 mil habitantes, así como importantes tramos carreteros.
El desafío está en la infraestructura
En 2015, el gobierno mexicano anunció que otorgaría a diferentes empresas privadas el acceso al espectro radioeléctrico de la banda cuya potencia es de 700 Megahertz. El objetivo es reducir costos de los operadores, consumidores del servicio y además se elevará su calidad.
Leer más sobre los comienzos del proyecto.
A principios de julio, América Móvil y Telxius de Telefónica anunciaron que desplegarán un nuevo cable submarino de alta capacidad en la costa latinoamericana del Pacífico.
Según se informó en un comunicado, de la empresa de infraestructura de Telefónica, el proyecto mejorará las comunicaciones a nivel mundial.
