- El 70?% de los brasileños tiene acceso al 5G, pero lo usa menos del 15?%
-
Frente a estas limitaciones en el mercado masivo, el foco se traslada al segmento industrial, y los operadores consolidan negocios B2B
- Anatel impulsa pilotos en Zonas Francas de Exportación
Brasil se presenta como líder en infraestructura 5G en América Latina, con una cobertura habilitada en el 100?% de sus municipios. Sin embargo, la brecha entre disponibilidad y uso efectivo plantea un desafío estratégico para empresas del sector TIC: ¿cómo monetizar una red subutilizada y cerrar la brecha de adopción?
Cobertura total, adopción marginal
Desde finales de 2024, la banda de 3,5?GHz está habilitada en los 5.570 municipios del país, gracias a un despliegue anticipado del espectro liderado por el gobierno federal (a través de Anatel). Esta cobertura teórica equivale al 100?% del territorio y llega al 70?% de la población según el Ministerio de Comunicaciones de este país.
Pero el uso efectivo cuenta otra historia. Hasta octubre de 2024, solo el 11?% de las conexiones móviles eran 5G, y en zonas rurales, menos del 15?% de los usuarios tuvieron acceso real a la señal. Esta asimetría expone una realidad crítica: la infraestructura está, pero no se usa masivamente.
¿Por qué no se usa más el 5G?
Existen tres grandes barreras explican el desfase entre red y adopción:
- Dispositivos caros: el precio de smartphones compatibles con 5G sigue siendo prohibitivo para millones de brasileños. La falta de incentivos fiscales o subsidios agrava el problema.
- Desigualdad regional: si bien la red está desplegada, el acceso real está concentrado en zonas urbanas de alto poder adquisitivo. Regiones remotas carecen de condiciones técnicas, económicas y regulatorias.
- Legislaciones municipales obsoletas: aunque más de 1.000 ciudades actualizaron sus normativas para instalar antenas, muchas aún bloquean o retrasan despliegues por trabas burocráticas, según explica Conexis Brasil Digital.
Redes privadas: un modelo alternativo que crece
Frente a estas limitaciones en el mercado masivo, el foco se traslada al segmento industrial. Aquí es donde las redes móviles privadas 5G cobran protagonismo.
Anatel impulsa pilotos en Zonas Francas de Exportación (ZFE) como Río Grande, Paranaíba y Pecém, facilitando espectro y promoviendo alianzas entre operadoras, startups e industrias. Estas redes permiten:
-
Alta estabilidad y baja latencia.
-
Mayor seguridad operativa.
-
Conectividad dedicada para entornos críticos (fábricas, puertos, aeropuertos).
Casos destacados:
-
Nestlé en Caçapava (SP) aumentó su eficiencia operativa un 25?% al conectar robots e IoT con una red privada junto a Claro y Ericsson.
-
Gerdau, en alianza con Embratel, implementó en Ouro Branco (MG) un sistema para vehículos autónomos y monitoreo en tiempo real.
-
El Puerto de Santos activó una red privada 5G para automatizar procesos logísticos y vigilancia por drones.
Para empresas TIC: un ecosistema con oportunidades latentes
El contexto brasileño plantea un dilema estratégico: red nacional, pero uso parcial. Para empresas TIC, este desfase no es solo un problema: es una oportunidad de intervención. Las áreas con alto potencial:
-
Integración de redes privadas: diseño, instalación y operación llave en mano para zonas industriales y logísticas.
-
Dispositivos y gateways asequibles: desarrollo de hardware intermedio (routers, CPEs, sensores) que permita a más industrias aprovechar el 5G sin depender del acceso masivo móvil.
-
Software vertical e IA: sistemas de análisis en tiempo real, mantenimiento predictivo, automatización basada en eventos, etc.
-
Consultoría en adopción: ayudar a gobiernos locales e industrias a entender cuándo, cómo y para qué usar 5G.
El fin de la brecha
El sector privado puede moverse rápido, pero necesita un entorno favorable. Algunas medidas clave que aún faltan en la agenda pública:
-
Subsidios o incentivos fiscales para reducir el costo de dispositivos 5G.
-
Programas de conectividad rural más agresivos (por ejemplo, expansión de fibra en zonas agrícolas).
-
Formación técnica sobre redes privadas e industria 4.0.
-
Leyes municipales unificadas y simplificadas para antenas.
El gobierno ha dado señales con iniciativas como “Norte Conectado” y la modernización legislativa en 1.000 ciudades. Pero el salto a una adopción plena requiere políticas industriales proactivas, que hoy siguen en debate.
Brasil es un gigante dormido del 5G. La red está desplegada, pero no activada plenamente. La brecha entre cobertura y adopción representa tanto un obstáculo como una ventana de oportunidad para el sector TIC. Las redes privadas emergen como el canal más maduro para monetizar la infraestructura existente, mientras se trabaja por una adopción masiva real.
El desafío no es solo tecnológico. Es de accesibilidad, estrategia y visión de largo plazo. Para las empresas TIC, el momento de actuar es ahora: ayudar a cerrar la brecha de adopción y construir modelos de negocio adaptados a una conectividad que ya existe, pero todavía no se usa.