- La plataforma realizó cambios radicales, que impactan en los usuarios y en las empresas que la usan como canal publicitario
- La aplicación quiere convertirse en la mayor plataforma financiera de Occidente
X.com fue un banco fundado por Elon Musk en el año 1999, que más tarde se fusionó con Confinity y luego conocimos como PayPal. Hace 5 años, cuando compró el dominio X.com, nadie se imaginaba que esa X sería el nuevo nombre de la mítica plataforma Twitter.
La decisión de cambiar el logo y el nombre de Twitter a X es un punto de inflexión en la compañía, que apunta a la creación de una super aplicación, que integre la red social con una poderosa plataforma de transacciones financieras.
La aplicación cuenta con 1.300 millones de cuentas, pero solo 380 millones pertenecen a usuarios activos. Lo que Elon Musk imagina, es que a través de esa base global gigante puede implementar redes de comercio, criptomonedas, pagos P2P, y todo lo que las regulaciones no le impidan.
La directora ejecutiva de la empresa, Linda Yaccarino, ya anunció que X incluiría prestaciones de fintech: pagos y banca digital. Ya consiguieron licencias como transmisores de dinero en 4 estados de Estados Unidos: Arizona, Michigan, Missouri y New Hampshire.
Cambios radicales para usuarios y empresas
Desde que Elon Musk asumió el control de la aplicación, cambiaron las reglas de juego para anunciantes y usuarios.
Aunque no está claro si estos cambios obedecen a sus objetivos de largo plazo (convertir la red en un plataforma servicios financieros), lo cierto es que en la actualidad los usuarios se quejan porque ya no reconocen la antigua red social que los convocaba.
Entre los cambios más impactantes:
- Pérdída de visibilidad
Twitter Blue es el sistema de suscripción paga de la plataforma, que da acceso a un amplio abanico de prestaciones. Los usuarios que no abonan esta cuota sufren una reducción total de visibilidad, y para las empresas ahora resulta imposible generar alcance orgánico sin pagar.
Pero no es el único cambio radical que trae X, como fue recientemente bautizada.
- Adiós a los tuits
Las publicaciones ya no se llaman tuits, sino posteos.
- Acceso
Los posteos en la red social ahora serán inaccesibles si el usuario no tiene una cuenta. (Antes se podían leer y explorar cuentas de usuarios sin iniciar sesión).
- Reducción del alcance de las encuestas
Las encuestas eran un clásico de Twitter y las empresas a través de ellas recopilaban datos, generaban debates y visibilidad de las distintas opiniones de las comunidades. Desde la implementación del nuevo sistema, los usuarios que no pagan Twitter Blue ya no votan en las encuestas, reduciendo notablemente la participación y la interacción.
- Edición de textos
La edición de posteos también es un privilegio que solo tienen los usuarios verificados que abonan la suscripción.
- Una buena: el anuncio de Notes
Para la creación de textos más extensos en la plataforma, la red social creó Notes, que permite redactar textos largos, con imágenes y tuits insertados, como en los blogs.
La nueva función, por ahora, está disponible en Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y Ghana, y el resto del mundo deberá esperar para poder disfrutarlas.
